Me siento abrigado por ti,
El tiempo todo lo da y todo lo quita
Fui a dar una vuelta, y solo encontré
miradas sibilinas, silencios resquebrajados,
maniquíes en escaparates sin sustancia,
lagrimas que caen del cielo,
hojas aterciopeladas, dulces
Y húmedas.
En los jardines de la Polinesia,
encuentro mi espacio, salvaje
libre. Estupefacto
concibo mi libertad,
somos hombres arcaicos.
Somos la especie más paradójica,
desde nuestros ancestros.
Mi piel morena, mi cuerpo
exótico y magnánimo,
recordándome a un guerrero
tongano y polinesio
sencillo y,,, mutado.
En varón Americano.